El University Medical Center Groningen, también conocido por sus siglas UMCG, ha sido desde el principio un modelo a seguir para el desarrollo de la arquitectura de hospitales. Este complejo hospitalario tiene una larga tradición, cuyos orígenes se remontan al siglo XVIII. Desde entonces, tanto la oferta médica como la estructura de edificio han ido ampliándose y evolucionando. Además de las transformaciones urbanísticas y arquitectónicas, también se aprecian -pequeñas intervenciones en el edificio – como la modernización de todas las instalaciones de aseo – que permiten el cumplimiento de los máximos requisitos de limpieza e higiene. Desde 2014, las oficinas de proyectos de Groningen Interieurarchitectuur Hart und Royal Haskoning sustituyen en varias fases de construcción los 2 000 inodoros del edificio existente por innovadoras soluciones de baño de Villeroy & Boch, adaptadas a los máximos requisitos de higiene.
"Healing Architecture"
La medicina ha dejado de ser una simple solución de problemas de salud para convertirse en un auténtico sector servicios. Los precursores de esta transformación han sido los países escandinavos y los Países Bajos, que ya en los años ochenta desarrollaron estudios sobre el concepto de “Healing Architecture“, que prestaba una mayor atención a las necesidades de las personas. Factores como la configuración de espacios con luz natural, protección contra el ruido y las cargas medioambientales, materiales y colores, diseño de los planos y libre acceso a la naturaleza, pueden ser muy efectivos contra la ansiedad y el estrés. El UMCG fue el primer hospital en explorar estos nuevos planteamientos y realizar una amplia transformación de sus instalaciones, lo que supuso una fase de construcción de 20 años de duración.
Una ciudad dentro de otra
Con más de 1 300 camas para pacientes hospitalizados, 18 000 pacientes externos y visitantes diarios, 12 000 trabajadores y cerca de 3 500 estudiantes, el complejo ocupa un tamaño similar al de una ciudad de provincias. La arquitectura del UMCG recuerda más a un centro comercial urbano que a un hospital aséptico: el terreno se distribuye en barrios, calles, plazas y zonas verdes, con espacios para la investigación, la formación, el comercio y la cultura. En el área pública del hospital se encuentra una ancha calle comercial con un diseño de interiores sorprendente y mucho espacio para el arte. Naturalmente, también se tienen en cuenta todos los requisitos de higiene y seguridad propios de un hospital. Esto es posible gracias a la total separación de las vías utilizadas por visitantes, pacientes y personal.
Sistemas flexibles para el futuro
El UMCG tal como lo conocemos hoy día se inauguró en el año 1997 como un complejo arquitectónico unitario. Debido a los rápidos avances tecnológicos en materia sanitaria y a las demandas de programa, confort y diseño en continuo cambio, este tipo de complejos tienen que readaptarse y sanearse constantemente. Entre los edificios más recientes, se cuentan el “Research Laboratory” de UNStudio y el “Education Building“ de Thomas Rau. En 2012 se inauguró el Instituto europeo de investigación sobre la biología del envejecimiento (ERIBA) de Rudy Uytenhaak. Para los próximos años se prevé la construcción de nuevas instalaciones.
Máximos requisitos de higiene
En un complejo arquitectónico del tamaño de una pequeña ciudad, las intervenciones más insignificantes se convierten en un verdadero reto, como ocurre con el saneamiento de las instalaciones de aseo. Todos los inodoros del edificio existente se están cambiando desde 2014 por productos de Villeroy & Boch, cumpliendo con los máximos estándares de higiene.
El responsable de la implementación de estas medidas de saneamiento es el arquitecto Wim Hart, de Interieurarchitectuur Hart und Royal HaskoningDHV, con sede en Groningen. Los inodoros se sustituyen planta por planta, comenzando por los aseos públicos, para continuar por los aseos situados en la zona ambulatoria y en los quirófanos. Los elegantes productos instalados proceden de la colección Memento, así como de la serie Architectura. La superficie CeramicPlus repele la suciedad y se encarga de que no se acumulen restos en las superficies cerámicas. Productos como el inodoro DirectFlush, sin borde de descarga, cumplen con los máximos estándares de higiene. Con cerca de 2 000 aseos en el complejo y 150 descargas por hora, el control del consumo de agua también resulta esencial para lograr el saneamiento eficiente de las instalaciones de aseo. La salud, la recuperación y el bienestar de los pacientes son la principal preocupación en cualquier edificio sanitario; esto solo puede conseguirse garantizando los máximos requisitos de limpieza e higiene en todas las áreas, tanto públicas como privadas.